Archivo de enero, 2012

En la crisis se crea

Posted in Desarrollo Organizacional, Desarrollo Personal, General, Linea Valores on 27 enero, 2012 by quazarum

“La creatividad nunca ha sido sensata. ¿Por qué habría de serlo? ¿Por qué tú deberías ser sensato?”

Yo creo = del verbo creer

Yo creo = del verbo crear

¿Qué estas creando en tu vida?

La creatividad es un valor fundamental en nuestra vida cotidiana,  ya sea para nuestra labor diaria, empresa, proyecto,  emprendimiento, relaciones, familia… Cuanto más desafiante es el contexto, mas valor tiene ser creativo.

Conectaros con nuestros talentos y propósito en la vida, despierta a ese creativo que todos llevamos dentro

En Quazarum, entrenamos en valores.

Si queres reibir mas información a cerca de nuestros entrenamientos personales y organizacionales escribinos a: info@quazarum.com.ar

 

 

Un espejo sin reflejo: Identidad esfumada

Posted in Desarrollo Personal with tags , on 13 enero, 2012 by quazarum

María despertó una mañana, como tantas otras de su vida. Al sonar el despertador, como todos los días, se desperezó, abrió sus ojos y se miró al espejo. Asustada, no encontró su reflejo frente a él, su imagen desdibujada, le mostró un cuerpo sin alma. ¿Que había pasado con ella? Quizás, entregada a una corriente colectiva, su reflejo era solo otro más, como el de tantas personas que andan por la vida sin sintonizar su alma.

María, era una enajenada mas, estereotipada de tal forma que sus diferencias se habían esfumado, su forma de vestir, de hablar, de pensar… se habían fusionado con el gran modelo del TENER, cuyo lema es TENGO, LUEGO EXISTO. Si esta fusión la hiciera feliz, esta historia carecería de trama, solo sería una mas, de tantos otros náufragos que van a la deriva en este mar de la vida.

¿Cómo podría sentirse feliz cuando ni siquiera puede reconocerse a sí misma? Entonces pensó, e intentó buscar sus recuerdos, recorrer su vida para encontrarse. Tenía recuerdos claros de su historia, pero se proyectaban en su mente como una película de la cual ella era solo una espectadora, sin protagonismo alguno. Lavó su cara con abundante agua fría, y sintió un gran placer al hacerlo, como si cada gota que acariciaba su rostro, le penetrara una claridad jamás antes sentida por ella. El agua, era como pequeñas gotas de luz… lo disfrutó solo por un instante, aunque la sensación la acompañaría por mucho tiempo.

Asombrada por un despertar tan diferente, asustada ante la falta de reflejo de su imagen, se dirigió a la cocina, a prepararse en automático, el desayuno de todos los días. Intentó olvidar lo ocurrido y comenzó su día, mirando el reloj, agitándose para llegar a aquel lugar que pareciera nunca llega… sumergiéndose en su diaria rutina, entregándose a la vorágine de un día habitual, normal, a esa carrera… ¿Cual? Esa que todos corremos para llegar… ¿Donde? Vaya a saber donde….!!! Quizás, donde todos van…
Exiliada de su ser, con una sensación de estar viendo su vida, sin formar parte de ella, quiso abocarse a su labor diaria. Por momentos lograba concentrarse, y cuanto mas lo hacia, mas pretendía escaparse de la sensación que tuvo al despertar. Pretendió vivir un día normal, aunque por momentos se preguntaba: ¿estaré enloqueciendo? ¿Será esto stress? Maria había estado trabajando duro durante los últimos meses, en aquel proyecto que prometía un ascenso en su carrera… ¿cual? Esa, que todos corren…

Sus preguntas silenciosas, estaban hechas con el mismo tinte que tenia su vida, el estereotipo del tener, por eso, estaban teñidas de lo habitual, seguramente sería stress, algo tan de moda en estos tiempos. Y así transcurrió su día, aquel y otros tantos… acudiendo a la conciencia colectiva que la llevaría a buscar caminos cortos, rápidos, ágiles para poder continuar corriendo. ¿Dónde? Donde todos corren…

Su terapeuta le sugirió tomara unas vacaciones, su amiga y compañera de trabajo le decía que no era momento de parar, ya que estaba pronta a llegar… ¿Dónde? ¿Quién lo sabe? Las contradicciones la abrumaban, por lo que decidió acudir a tantas soluciones a medida de la enajenación que encontrara, productos anti stress, masajes anti stress… todos los que toman las personas que corren, vaya a saber donde…
Abrumada por tanta presión, llegó finalmente el día en que presentaría el gran proyecto, ése que la llevaría a estar en ese lugar… ¿Cuál? Ese donde todos quieren llegar…

Su proyecto fue exitoso, fue aprobado y obtuvo su ascenso. Por un instante se sintió en paz, con esa sensación de haber llegado. Festejó junto a su jefe y a su compañera amiga, de la forma en que se festejan estos acontecimientos. Al  llegar a su casa, se miró frente al espejo, y esta vez, su imagen se había esfumado mucho más aún. Se acostó a descansar, y tras varias horas de intentar conciliar el sueño, decidió consumir mas de lo que todos consumen cuando no pueden conciliar el sueño, esos productos que se usan para dormir, que todos los que llegan no se donde, consumen.

Al día siguiente, con esa sensación de no saber quien realmente era ella, decide tomarse unas vacaciones, para juntar la energía necesaria para llegar donde tiene que llegar con el nuevo proyecto… ¿Dónde? No lo sé, ¿será al siguiente lugar que debe llegarse luego de haber llegado…?
En sus vacaciones – si podemos llamarlas así a 5 días de descanso, después de haber trabajado dos años seguidos- María decide estar sola, en un lugar reparado y tranquilo, con un paisaje paradisíaco, donde se puede ver el horizonte, y la naturaleza sorprende con su belleza, y de esta forma, olvidar por unos momentos, la carrera que corre cada día. Ella buscaba, encontrar nuevamente su reflejo frente al espejo, tenia la esperanza que con unos días de descanso, podría resolver este inconveniente, que tanto la asustaba y angustiaba.

Los primeros días dedicó tiempo a leer, todos aquellos libros que nunca podía leer, por estar corriendo la carrera… -bueno, ya saben cual- Luego, comenzó a disfrutar de la naturaleza, contemplando el paisaje que se imponía frente a su ventana. Sí, lo veía desde la ventana. De repente, un impulso la llevó a interactuar con ese paisaje, y dedicó varias horas a caminar por el lugar. Un bosque frondoso la llevaba por caminos increíbles, donde el encanto de su belleza logró atraerla de forma tal, que su cabeza se detuvo, y solo se dejó llevar por sus sentidos. Pasaron las horas casi sin darse cuenta, cuando la luna y las estrellas la iluminaron, llenándola de sensaciones, que hacia mucho tiempo había dejado de sentir. Entones, se entregó a sus sueños y comenzó a recordar el sentido de su HACER cotidiano. Y se dio cuenta, que su sentido carecía de sentido, que se había dejado llevar por el TENER, y por la carrera que todos corren…

Se recostó en el pasto, mirando el imponente cielo repleto de estrellas, respiró profundo, y se remontó hacia su ser… ése que tanto había resignado por el hacer, ése que cuando corría la carrera, con el apuro, quedaba en el olvido. Sintió paz por un instante. Se entregó a la reflexión. Así terminó su último día de vacaciones. Sí, el quinto día.
De regreso, María llegó a su casa, se miró frente al espejo, y pudo ver su imagen por un instante, hasta que su teléfono celular sonó, y le recordó todo lo que tenia que hacer por haber estado 5 días, sin correr la carrera, que todos corren… Su imagen entonces, volvió a esfumarse… Al día siguiente, antes que suene su despertador, Maria se despertó. Recordó la sensación que tuvo la noche anterior al contemplar el cielo estrellado y ocurrió algo maravilloso. Comenzaron a sonar en su cabeza, preguntas, preguntas, y más preguntas…

¿Para que hago lo que hago?

¿Quien quería ser yo antes de comenzar a hacer?

¿Cuál es el sentido que quiero darle a mi vida?

¿Que misión tengo en este mundo?

¿Ser feliz es una meta o es el camino?

Esas preguntas, formuladas en la profundidad de su ser, lograron que Maria, en su carrera diaria para llegar quien sabe donde, la llevaran a querer parar por instantes. Lograron que ella dedicara algunos momentos a la reflexión. A visualizar su norte, para corregir desvíos, a volver a sentir cada día lo mágico que es ir por sus sueños, elegir donde querer llegar, recordar su rumbo, poner sentido a la acción. Con el tiempo, la condujeron a recuperar su imagen en el espejo… a elegir la vida que quería vivir y que había relegado por estar tan ocupada en HACER y en TENER.

Hoy, ya no corre la carrera, hoy transita su propio camino. Dedica tanto a SER, que descubrió que las acciones salen casi sin darse cuenta, y que tiene todo lo que necesita sin haberse concentrado en TENER. Hoy María se reconoce frente al espejo y disfruta de las gotas de agua al lavarse la cara, las cuales siente como gotas de luz. Se prepara un desayuno diferente, de acuerdo a lo que su cuerpo necesita, ya que esta atenta a él, tanto como a su alma, a su conciencia… Ella comprendió que sus días pueden ser diferentes, aunque vaya a trabajar al mismo lugar, que solo se trata de disfrutar el camino, ya que llegar… donde todos llegan… no marca ninguna diferencia, sí lo marca estar atenta, entregarse a cada momento, siendo única y diferente, y de esta forma sumar sus diferencias a este mundo, construyendo un camino nuevo, único, irrepetible… dejando que su alma se exprese y siendo fiel a lo que ella le dice… coherente en su sentir, pensar y hacer…

Hoy María, no corre, marca una diferencia en todas las personas que tienen la posibilidad de estar en contacto con ella, y por sobre todo SE MIRA EL ESPEJO, RECONOCIENDO Y DISFRUTANDO LA IMAGEN QUE LE DEVUELVE… IDENTIDAD
María eligió el camino de la evolución personal. Todos, en algún momento de nuestras vidas, nos topamos con un espejo que no nos devuelve la imagen que creemos tener de nosotros mismos, perdiendo identidad. Algunos elegimos el camino de la evolución, mas largo quizás, inexplorado, incierto… pero nuestro. Otros, eligen los caminos ya transitados, mas cortos tal vez, mas ciertos… pero de otros. Ambos eligen. Eso es maravilloso, que podamos elegir

Fernanda Beltrán Costa